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Víctima en accidente de taxi pide reparación de daños



FOTO ILUSTRATIVA

Martes 25 de Abril de 2017 8:00 pm

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A cinco días de sufrir un accidente en taxi, el señor Jorge Monroy Larios continúa sin obtener apoyo del o los responsables del percance; actualmente continúa postrado en cama, con dolores y sin poder trabajar.


A cinco días de haber sufrido un accidente en taxi, el señor Jorge Monroy Larios continúa sin obtener apoyo del o los responsables que lo originaron, y que actualmente continúa postrado en cama, con dolores y sin poder trabajar.

Originario de Cuauhtémoc y con 60 años, don Jorge es vendedor de bolas de dulce, duritos, y caramelos. Luego del accidente registrado el 21 de abril, se ha visto imposibilitado de seguir trabajando para llevar sustento a su familia.

Lamentó que luego del accidente, no ha recibido apoyo de quien resultó responsable del accidente, “me golpee la cadera, pero siento un dolor muy fuerte hasta la vejiga, no puedo ni levantarme de la cama”, explica con dificultad para expresarse.

Precisó que la mañana del viernes cerca de las 8:30 viajaba en taxi al Complejo administrativo, sin embargo, en el puente del Hospital Regional Universitario, un carro los embistió justo en la puerta del copiloto, lugar donde él viajaba.

Recordó que al momento del choque, la vista se le nubló y las piernas no le funcionaban, sin embargo poco a poco fue recuperando la movilidad, aunque actualmente se la pasa encamado, sin poder moverse, debido a que los dolores que tiene son intensos.

“Mi esposa me ayuda cuando tengo que ir al baño, porque yo solo no puedo levantarme; me desespera estar en estas condiciones, porque yo ocupo estar activo trabajando para traer de comer a mi casa”.

Indicó que cuando tuvo el accidente, el taxista le dijo que le daba 500 pesos por las lesiones, sin embargo cuando lo dieron de alta en el Hospital Regional, posteriormente fue a una clínica particular.

“Me asusté de tan feo que me dolía porque se me acabó la anestesia, por lo que me llevaron a la clínica Córdova, nos cobraron la consulta y el medicamento, en total hemos pagado mucho dinero”.

Lamento que lo que más le pesa es que no puede trabajar, ya que de la venta saca alrededor de 3 mil pesos cada semana y los fines de semana surte su mercancía.

Simplemente pidió a los responsables del accidente que se hagan responsables de sus gastos médicos, ya que consideró injusto que provoquen un accidente y se desatiendan del mismo.

Hugo RAMÍREZ PULIDO



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